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Brighton fue una experiencia clave en mi vida. El impulso para continuar hacia adelante sin miedo a nada. Si has llegado hasta aquí y quieres seguir leyendo sobre los viajes de mi vida o hacerme alguna pregunta, te invito a leerme en www.teparados.es

viernes, 12 de julio de 2013

Historia de una mopa que nunca me gustó

Un mes. Ni un día más ni un día menos. Es el tiempo que llevo trabajando en el Sussex County Hospital de Brighton. 30 días que han sido toda una aventura. Bueno, no una, en realidad, han sido mil y una aventuras.

El hospital es gigante. Y creo que sólo he trabajado tres veces en la misma zona. Por lo tanto...el resto del tiempo he estado rodando de un lado a otro. Cada jornada laboral compañeros nuevos, tareas nuevas, pacientes nuevos...y luchas nuevas!!


De verdad, yo pensaba que lo de la rivalidad en el trabajo, lo de querer destacar...ser un poco trepa y tal sólo pasaba en mi mundillo, en los medios de comunicación. Bueno, concretamente en la tele. Pero me he dado cuenta que no es así.  Y es muy triste a mi parecer. A la par que ridículo.

Cuando yo nunca he intentado pisar ninguna cabeza para conseguir crecer en mi carrera de periodista. Me encuentro con que en esta jungla, si quiero sobrevivir tengo que correr para ser la primera en fichar y llegar al almacén, pelear por una bolsa de plástico transparente, morder a ciertas  "compañeras" y luchar por agarrar el stick de una mopa cada día y poder hacer mi trabajo. Puede sonar a chiste. Lo sé. A mi misma me parece de risa. Pero os aseguro que es agotador.

Y es que, como os comenté, a parte de alimentar a los abuelillos, entre mis tareas diarias se encuentra pasar la mopa por algunas de las habitaciones o de pacientes o simplemente del staff. Pero claro, para poder hacer eso...necesito los instrumentos y productos necesarios. Y, a veces, no es fácil conseguirlos.

A ver, quiero dejar claro que en general la gente que trabaja en este centro es bastante maja (sin dejar de ser ingleses). Pero...en concreto, mi historia se desarrolla en la octava planta de uno de los edificios del hospital (tampoco voy a dar detalles). En esa planta trabaja una chica que viene a ser la reina de Zambia. Lo del bulling en los colegios es poco con lo que ella hace allí.

Primer dia: Llego a la susodicha zona. La chica de cocina me explica cual es mi labor allí. Lo primero debo cambiar las basuras y para eso me dirijo al almacén. Al entrar me encuentro a dos compañeros. "Hello! Are you all right?"- es mi saludo. Su respuesta: Silencio. Yo sigo a lo mio: "Do you know where can I find yellow bags, please?". Su respuesta: ... Silencio otra vez.
Por un segundo pensé que yo en realidad no estaba hablando, que mi voz no se proyectaba y que yo me estaba imaginando todo. Pero después de la tercera pregunta me di cuenta de que no. De que sin conocerme de nada me estaban haciendo el vacio. FLIPANTE. La tercera pregunta fue la de "¿Dónde hay otra mopa?. Respuesta: "No hay más. Esta es mía".

OMG...!! Laura empieza a echar humo por la cabeza... "Esto no puede estar pasando. Venga ya. No pienso luchar por una mopa... Si no me la deja, pues no limpio y se acabó". - fue lo que pensé. Y...en realidad lo que hice ese primer dia.

Segundo dia: Misma historia. Sólo que esta vez el cable me hizo cortocircuito para el otro lado y me dio por declarar la guerra yo también. Habría que divertirse un poco...¿no? Asi que llamé a la supervisora.
Y empezó la fiesta. Eso si. Mi "compi" tenía experiencia y por lo tanto ventaja en esta lucha. Me acusó de no haber limpiado el dia anterior. En fin... La historia de la mopa (por ese dia) terminó cuando la jefa me trajo una prestada solo para mi. DE LOCOS.

Luego está la historia de aquella que si que te cede su mopa por completo y cuando le preguntas que es lo que debes hacer en toda tu jornada laboral, en vez de explicarte te dice: "Kill your time!". :O

Podría seguir contando pero en realidad ya no tiene chicha la cosa. Una vez que te hacen tres días la misma jugada, a la cuarta ya vas por delante. Ahora ya ha empezado a respetarme. No digo más.

Y bueno...me rio (a veces, reconozco, por no llorar). Porque si esto es una lucha "divertida", la que no tiene ni pizca de gracia es la lucha de los viernes (dia de pago) con la agencia. En la vida he visto tanta incompetencia, o tanta poca vergüenza. A saber, porque ya me planteo que en realidad es que se están riendo de mi.

La primera semana se olvidaron de pagarme (uy! un error informático, tendrás que esperar al viernes que viene...). Y esperé. Entonces...anda, otro error. Pasate por aquí si quieres cobrar con un cheque. Tercera semana. Ahora nos hemos equivocado y te pagamos las horas del domingo al mismo precio que un miércoles... Y asi.

Ya me he encargado de sacarle los colores al manager un par de veces. El otro día ya decidí hasta dejar de ser "polite" Pero da igual... después de mucho "Sorry sorry" y de lo vamos a solucionar... No se de quién será hija, sobrina o amante la chica que se encarga del tema del hospital porque no hay forma!.

Lo bueno de todo esto es que estoy en Inglaterra. Y aquí por trabajo que no sea. De momento he decidido tomarme un Kit kat (ceder mi mopa)  y alejarme un poco de este trajín que me está volviendo loca.
Mañana pruebo un curro nuevo. Voy a trabajar de camarera en un evento que se celebra en el BHASVIC. Ya os contaré que tal... Me han cogido debido a mi gran experiencia como camarera en España...jaaaaaaaaaaaaaa!!! ;)

A parte, el lunes tengo una entrevista en una tienda de deportes del centro de Brighton, para dependienta. A ver si saliera...Fingers crossed!!

Menos mal que el verano ha llegado a Brighton de verdad y que el solazo y los 26 graditos que están haciendo esta semana me hacen desconectar de todo. La jungla desaparece de mi cabeza en cuanto mis pies pisan las piedrecillas de la playa . Siempre en buena compañía echo unas cervezas y unas risas contando mis historias de desastrosas agencias de trabajo temporal y mopas que nunca me gustaron...


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